Las pruebas genéticas y de intolerancia se han convertido en una poderosa herramienta para saber donde falla tu dieta y que alimentos debes evitar
Tiempo de lectura 8 min.
Autor Dr. Sergio Martínez Escobar
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Las pruebas genéticas y de intolerancia a los alimentos permiten conocer cual es el freno de base que tenemos a la hora de dejar el peso. Ponernos a dieta y no dejar el peso adecuado puede deberse a múltiples factores, la mayoría son problemas tiroideos, ovarios, resistencia a la insulina, procesos inflamatorios o medicación.
Cuando se han descartado las causas más comunes, hay que buscar en los genes y en las reacciones específicas a algunos alimentos. Hoy en día podemos encontrar numerosas opciones, algunas incluso pueden adquirirse por internet. Lo cierto es que para saber que test es el más adecuado para cada caso, es ideal contar con el asesoramiento profesional, tanto para la elección como para la interpretación.
Los test genéticos suelen hacer un rastreo de muchas enfermedades, algunas que no nos llevan a pensar directamente en la ganancia de peso, como pueda ser el Síndrome de Ovario Poliquístico o defectos enzimáticos concretos del metabolismo de los hidratos de carbono o de la grasa. De ahí la importancia de una correcta interpretación.
Referente al análisis de intolerancias alimenticias, la conclusión es ligeramente más directa. Aquellos alimentos a los que somos intolerantes debemos evitarlos, si bien, los test habituales solo presentan unas 200 moléculas diferentes (antígenos), con lo que es importante valorar reacciones cruzadas con otras sustancias.
¿Cómo se hace un test genético?
Para hacer un test genético, se toma una muestra de tejido del interior de la boca con una torunda de algodón, o bien unos centímetros cúbicos de saliva o sangre. El por qué se usan estas muestras es por que las células que están dispersas contienen nuestro material genético, unos 20.000 genes en cada pequeño núcleo, un 2% del total del ADN que contiene toda la información sobre lo que hemos sido, somos y vamos a ser. Hasta 4.000 enfermedades tienen un componente genético.
¿Cómo se hacen los test de intolerancias?
Los test de intolerancia se hacen fundamentalmente con muestras de sangre. Su objetivo es saber si hay defensas que reconozcan como peligrosos algunos compuestos alimenticios y puedan reaccionar como si se tratara de un elemento peligroso. Esas defensas en sangre son unas proteínas (anticuerpos) que cuando se activan determinan procesos inflamatorios.
¿Cuándo hacer un test genético y cuando un test de intolerancias?
En cuanto a la pérdida de peso un test de intolerancia nos permite conocer que tipo de alimentos debemos de eliminar de la dieta, para mejorar nuestras digestiones y de forma secundaria desbloquear un proceso de pérdida de peso. Un test genético lo haremos para saber cuales son las enfermedades con un componente genético, frente a las que tenemos una predisposición a padecer. Conocer las enfermedades potenciales que podemos desarrollar permite elaborar estrategias de prevención para disminuir el componente ambiental que precipite su aparición.
CONSEJO: Si tu perdida de peso no sigue un ritmo de unos 700 gr- 1 kg a la semana y haces la dieta correctamente, piensa que puede haber problemas de intolerancias y/o genéticos… siempre que no tengas problemas endocrinos, ginecológicos o farmacológicos que motiven ese enlentecimiento.
Confío que te haya parecido interesante el artículo, pero sobre todo que te resulte útil. Hoy en día el mundo evoluciona a velocidad de vértigo, el conocimiento sobre una de las epidemias de este siglo (el sobrepeso) también.
Si este artículo te ha gustado, no te pierdas el siguiente…te contaré cual es la tecnología más avanzada para la pérdida de peso.
¡Muchísimas gracias por leerme!
Sergio
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